

La bandera de México, manzana de la discordia en las protestas de Los Ángeles
La bandera mexicana se ha convertido en una manzana de la discordia en las protestas de esta semana en Los Ángeles, ondeada por manifestantes orgullosos de su herencia pero considerada por el gobierno de Donald Trump como presagio de una "invasión extranjera" en Estados Unidos.
Desde hace cinco días, los manifestantes han realizado pequeñas concentraciones, en su mayoría pacíficas, contra las redadas migratorias en la ciudad, mientras el resto de Los Ángeles sigue con su vida normal, con estrenos de alfombra roja, entregas de premios, tráfico y turistas.
Sin embargo, se han producido algunos incidentes violentos llamativos, aunque aislados y esporádicos, que han generado imágenes impactantes de personas ondeando banderas mexicanas durante enfrentamientos con las fuerzas del orden bajo cielos llenos de humo.
Son esas fotografías las que Trump y sus funcionarios han aprovechado para justificar su extraordinaria medida de desplegar miles de soldados en la ciudad californiana, a pesar de las enérgicas protestas de las autoridades locales.
"La única bandera que ondeará triunfante en las calles de Los Ángeles es la bandera estadounidense, que Dios me ayude", dijo el presidente a los militares el martes en la base militar de Fort Bragg, en Carolina del Norte.
Los republicanos se alinearon detrás de Trump para presentar las protestas como una invasión, con la bandera mexicana como su símbolo y los manifestantes como insurrectos.
"Miren todas las banderas extranjeras. Los Ángeles es territorio ocupado", publicó en la red social X Stephen Miller, principal asesor de migración de la Casa Blanca.
Izar banderas extranjeras en Estados Unidos no es ilegal según la Primera Enmienda de la Constitución, que garantiza la libertad de expresión. Pero la de México ya ha sido objeto de disputa en Los Ángeles, la capital no oficial de la diáspora mexicana.
En 1994, el estandarte verde, blanco y rojo del país latinoamericano también fue ondeado por los manifestantes como señal de solidaridad contra una ley que pretendía excluir a los migrantes indocumentados de servicios como la educación y la salud.
En ese momento, como ahora, algunos lo consideraron un símbolo de desafío antiestadounidense, lo que provocó tal polarización que contribuyó a la aprobación de la legislación (luego revocada por la justicia), según Mike Madrid, estratega republicano que estudia las tendencias del voto latino.
"Por eso resulta un poco extraño ver que se utilice la misma estrategia cuando la última vez fracasó estrepitosamente", declaró a la AFP Madrid, autor del libro "The Latino Century" ("El siglo latino").
- "Gran ironía" -
Los manifestantes que hablaron con medios locales esta semana, incluidos los que dijeron ser ciudadanos estadounidenses, afirmaron que enarbolaban la bandera de México para mostrar su orgullo por su herencia y su solidaridad con los que se enfrentan a la deportación.
Diana Mena, una estadounidense de 28 años de padres mexicanos, dijo que tenía familiares en el ejército de Estados Unidos.
"Por mucho que entienda que tuvimos el privilegio de venir aquí, creo que es muy importante saber de dónde venimos", aseguró el martes a la AFP.
"Me beneficio de estar en un lugar que me ha brindado la oportunidad de progresar, pero eso no significa que vaya a olvidar nunca mis raíces y mi cultura", añadió.
El estratega Madrid, que es de ascendencia mexicana, sostiene que la capacidad de las personas para sentirse orgullosas de ambas culturas supone una paradoja para Trump, después de que el giro hacia la derecha de la comunidad latina contribuyera a su victoria electoral en 2024.
Ese cambio se produce a medida que más latinos nacen en el país en lugar de llegar como inmigrantes, lo que los convierte en votantes de clase trabajadora en lugar de una minoría étnica, afirmó.
De hecho, muchos miembros de la comunidad latina apoyan la campaña de Trump contra las personas indocumentadas y la migración irregular a Estados Unidos.
Pero el voto latino nunca es unánime "a menos que la comunidad se sienta atacada... Está muy claro a quién está atacando el presidente", dijo Madrid.
"La gran ironía es que todos se están moviendo a su favor. Eso habla de la disminución del número de votantes republicanos blancos sin estudios universitarios", consideró.
Un agente de policía del Capitolio de Estados Unidos en Washington declaró a la cadena CBS News que no tenía sentido que los republicanos se indignaran por las banderas mexicanas en las protestas de Los Ángeles.
Recordó la imagen de los partidarios de Trump que irrumpieron en esa sede del poder Legislativo el 6 de enero de 2021 portando emblemas de los estados rebeldes del sur que lucharon contra Estados Unidos durante la Guerra Civil de 1861 a 1865.
"¿No recuerdan las banderas confederadas del 6 de enero?", cuestionó.
M.Kohnen--JdB