

Tres médicos condenados a prisión en Polonia tras el deceso de una mujer a la que negaron un aborto
Tres médicos polacos fueron condenados el jueves a prisión por esperar demasiado antes de decidir practicar un aborto a una embarazada que murió por complicaciones, en un país con una de las leyes de salud reproductiva más estrictas de Europa.
La paciente, de 30 años y embarazada de 22 semanas, murió de un shock séptico en septiembre de 2021 en un hospital de la sureña Pszczyna.
Su deceso tuvo lugar un año después de que el Tribunal Constitucional, apoyado por el gobierno nacionalista de entonces, prohibiera la interrupción voluntaria del embarazo (IVE) en caso de malformación fetal grave.
La ley anti-IVE permite abortos en casos de violación o incesto, o cuando la vida de la madre corre peligro, pero en la práctica es tan restrictiva que los médicos tienen miedo o son reacios a practicarlo.
Los tres doctores fueron declarados culpables. Dos de ellos fueron condenados a más de un año de cárcel y el tercero a un año de prisión en suspenso, mientras que fueron inhabilitados a ejercer su profesión durante un periodo de cuatro a seis años, escribió en X Jolanta Budzowska, abogada de la familia.
El tribunal de distrito de Pszczyna no hizo públicos los motivos de la sentencia.
"Los médicos, aunque deberían haber actuado, no hicieron prácticamente nada para salvar la vida de Izabela", dijo la letrada citada por la agencia de noticias polaca PAP.
La muerte de la joven, que acudió al hospital con graves problemas relacionados con el embarazo, desencadenó en su momento una ola de manifestaciones en toda Polonia.
Según cifras oficiales, en 2024 sólo se practicaron 896 abortos en este país de 38 millones de habitantes. No obstante, una red llamada Aborto sin Fronteras afirmó haber ayudado a 47.000 personas a acceder a la IVE ese mismo año.
O.Leclercq--JdB